Bueno... Una amiga me dijo que hiciera un blog para publicar mis fics... que más que fics, son historias (divagaciones mentales) basadas un poco en lo que escucho, lo que veo, en el día... mi ánimo... en fin, son leseras sin mucho sentimiento que tarde o temprano llegan a un cayejón en el cual no se como seguir...

No soy muy buena con las letras... pero ese vacío puede ser bien tomado como un final :D...
como sea, ojalá ke el lector lo disfrute...

Dedicado a los amigos n.n!!... aunke solo unos pocos lo vean...

Sláinte!
(B)x(B)


pd: lo rojo son historias sueltas... y todo lo ke este en un solo tono (salvo el rojo) es una historia en continuidad

sábado, 12 de julio de 2008

Du ser, du støter på ... Kan jeg nekte? I

Corrían los años cincuenta... por ese entonces, yo tenía quince años. Mi padre era un empresario internacional, y gracias a él sé suficiente de negocios como para llevar mi propia inversión. Mi madre era dueña de la biblioteca más completa del país, poseía libros muy extraños, entre esos algunos que nadie se atrevería si quiera a mirar; pero yo si. Me lo pasaba metida en aquella biblioteca, todo el día después de la escuela, de todas formas estaba a solo una cuadra de casa. Imaginaba distintos mundos, ponía a prueba mis emociones hasta el límite con cada historia, mis favoritas eran los libros de terror y de conocimiento, me quedaba ahí encerrada hasta altas horas de la noche, no importaba, el barrio era tranquilo y seguro y mis padres confiaban, según yo, demasiado en que nada malo me pasaría. Nunca me interesó sociabilizar mucho, la verdad es que sólo conversaba con uno o dos compañeros de clases, pero con verlos medio día me bastaba y participar de aquéllas irritables conferencias de mi padre... Soy un ratón de biblioteca, jeje. de la sociedad con respecto a la A pesar de todos los quehaceres, eramos muy unidos, compartíamos los fines de semana durante la cena, íbamos al cine una vez al mes, y los tres participábamos de aquellas reuniones de negocios tan habituales de mi padre. En general eramos una familia recatada, honesta, sin grandes lujos, él siempre decía que no había que confiarse, que tarde o temprano podríamos quedarnos sin nada. Aún así procuraba que estuviésemos bien vestida para cada ocasión y teníamos una única criada, Stel, era ágil y joven, ella se encargaba de todo lo necesario y tenía toda nuestra confianza, nada ostentoso. Siempre salimos de lo común respecto a la religión, y es que ninguno gustaba de ir a misa aunque sí creyésemos en Dios. Yo no tenía pretendientes, claro, si me lucía tan poco; aunque a más de un empresario le hubiese gustado que su hijo se casase conmigo; por otra parte, otros tantos ni siquiera lo habrían considerado como opción, ya que sabía demasiado y no sería buena esposa, aunque si una excelente heredera. Mis padres me adoraban, aunque no me iba muy bien en la escuela ya que me distraida con facilidad. Matemáticas: 10; Historia: 8, nunca han sido lo mismo la verdad de lo que te dicen los maestros, por tanto siempre habían diferencias de opinión; Ingles: 10; Lenguaje: 7; música: 4, el asunto es que para estos ramos debía realizar una composición que era gran parte del promedio, siempre ocurría lo mismo: nunca escribía lo que los maestros querían escuchar, creo que mis ideas eran un tanto distorsionadas de su concepto de lo "lindo", pero en fin; arte: 7, mimas historia, aunque lo intentase, no podía, tenía que ser mi inspiración. Era una escuela de señoritas, así que habían otras asignaturas de gran importancia, como lo eran los arreglos florales y el baile. En ciencias me iba bastante bien, aunque me daba asco biología. Y bueno, infaltable, religión: 3; no es mi culpa que esos libros te abran la mente y hagan notar lo sínicos que so aquellos que se creen tan santos detrás de esas túnicas blancas... En fin...



Era viernes por la noche y mi madre cerraba algo temprano, m quedé una o dos horas más, leí algo sobre vampiros y me interesó bastante. El libro era viejo, con cubierta de cuero y hojas de papiro unidas con un hilo de seda, ella no supo que leía, pero no importaba. Parecía un tanto personal, como si fuese un diario de vida, pero escrito por otra persona, algo así como un cronista. Volteé una página y entre medio encontré un sobre que aun tenía el sello de esperma, como si fuese de la edad media. Lo despegué con cuidado y saqué la carta
"Al lector de este diario:
Ruego a usted que tenga especial cuidado desde ahora, grandes desgracias están por venir.
Ha usted leído un libro prohibido y si ha llegado a sus manos es por que él anda cerca, sea muy cauteloso si ama su vida y a su familia.
Todo lo escrito en este diario... es real



Espero comprenda
la urgencia del asunto"
Nadie firmaba... pero fue bastante claro el mensaje.
Guardé el libro y la carta en mi morral para estudiarlos en casa... de día... cuando era menos tétrico, es que gracias a este mensajito me volvió un tanto esquizofrénica y veía sombras moviéndose por todos lados, nada tranquilo como era siempre. Aunque era normal todo ese efecto dadas las condiciones... Salí lo más rápido que pude del edificio, enorme, de cinco pisos bastante antiguo (claro, si los fundadores fueron los abuelos de mis abuelos), corrí hasta la salida y cerré con candado el portón. No me quedé contemplando la arquitectura, no e fui por los pasajes más oscuros ni los caminos más largos antes de llegar a casa ni fui a la plaza cercana como hago cada noche; esta vez traté de no mirar sino que al frente y correr hasta el final de lo que quedaba de la calle. Estaba aterrada y emocionada al mismo tiempo por todo lo descubierto... esta sensación era bastante interesante, tenía pánico de lo que un día de estos podía tocar a mi puerta, pero quería saber y poder contemplar too aquello de lo que sería capaz... jamás experimenté algo parecido en alguno de esos libros, era la realidad...
En mi intento por llegar sin novedad a casa, algo falló en mi plan: de uno de esos callejones tan tentadores que quedaban de camino, un gruñido bastante espantoso hizo retumbar mi corazón, parecía un lobo hambriento, claramente no era n perro, sonaba más fuerte y aterrador. Mi curiosidad me venció... otra vez. Me detuve en frente y me giré lentamente para quedar con mis ojo inmerso en esa infinita oscuridad. Pude distinguir dos hombres, uno flácido y... sin vida en los brazos de un apuesto joven que vestía con ropas del siglo pasado, me miraba fijo, con atención, el verde intenso de sus ojos brillaba exageradamente, su piel era blanca y parecía que fuese a quebrarse en cualquier momento. No me sentí intimidada, más bien, parecí desafiarlo en mi intento de querer parecer más fuerte que... "eso". El hombre tenía una estatura bastante exagerada, no muy corpulento a simple vista, su cabello rubio era largo, contrario al común de la gente de la época, un tanto enchochado atado con una cinta de seda negra.
Parecía tan eterno ese momento, sentí mi fin, creí que moriría de un minuto a otro, pero el hombre que sostenía al otro sangrando, sólo me miraba sin moverse un centímetro. Mi vista logró despegarse de aquel verde esmeralda y se posó en sus labios bastante rojos y finos, perfectos... pero... ese tono... claro, como no me dí cuenta antes... era tan obvio.
Emocionada, no me había hecho nada (aún), así que me acerqué un par de pasos sumergiéndome en la oscuridad, cerró los ojos, sonrió y desapareció en un instante.
¡Oh, Dios! fue tan... excitante...

Todo el miedo desapareció, sólo quedó la duda y, bueno, el muerto que quizás pronto sería uno de ellos. Me dí la vuelta para continuar mi camino y ahí estaba él parado, ahora, delante mío, viéndome de manera intimidánte, yo... retrocedí sin ánimo, ganas, intenciones de huir de aquel momento, y él avanzaba un paso a cada uno que yo retrocedía. Lo desafié, me quedé quita, pero él continuó avanzando. De un momento a otro, sentí sus frías manos rosando mi pálido rostro, apartando mi cobrizo cabello de mi cuello, su otra mano sujetó mi cintura, yo estaba muda, sabía que este sería mi final, si no me convertía moriría en un instante disecada por él. Sus labios se posaron n mi yugular y lentamente abrió la boca dejando escapar un sonido gutural; sentí el aire helado entrar y salir tibio de su boca. En un segundo no supe que pasó, perdí la consciencia segura de mi basta muerte.

1 comentario:

Yulice dijo...

*o* vampiroooooooooooooooo babaaaaaa
Me recordo por como lo describiste al padre de Nada :3 es mah lindo ese vampiro ,aunque Lestat sigue siendo mi preferido por su gran ego y confianza en si mismo ;3.
Desde hace un par de semanas quiero un abrigo largo rojo aterciopelado como el de Marius :3, ojala encuentre uno antes de mi cumpleaños xD
Sigue con la historia cabritash ;3 se ve buena :3

 

Large Visitor Map